Cuando se trata de conducir, los adolescentes están llenos de emoción mientras que sus padres están llenos de incertidumbre. Los pensamientos de libertad y de pasar más tiempo con los amigos comienzan a dar vueltas en sus cabezas mientras los padres comienzan a pensar en los riesgos asociados que conlleva conducir. ¿Mantendrán la vista en la carretera? ¿Seguirán las reglas? ¿Tomarán buenas decisiones?
Aunque ambas partes se sienten atraídas por diferentes lados del espectro emocional, una cosa sigue siendo cierta: su hijo adolescente está listo para conducir y es hora de que usted, el padre, lo prepare para este hito de la vida.
A continuación se ofrecen 5 consejos a tener en cuenta:
Dar el ejemplo
A lo largo de sus vidas, sus hijos han observado lo que usted hace y han tomado notas mentales. Y conducir no es una excepción. Si no quiere que su hijo envíe mensajes de texto mientras conduce o que conduzca de forma agresiva, por ejemplo, no lo haga mientras usted está al volante.
Cada vez que estáis juntos en el coche es una oportunidad para dar un buen ejemplo.
Práctica
Ya sea que se trate de un instrumento o de su deporte favorito, como padres, alentamos a nuestros hijos a practicarlo. Esta misma noción se aplica a la enseñanza de nuestros hijos a conducir.
Aunque ya tenga una agenda muy apretada, comprométase a practicar la conducción varias veces por semana. Incluso algo tan sencillo como ir al supermercado es una oportunidad para que su hijo adolescente adquiera experiencia adicional al volante. Esto no solo lo ayudará a desarrollar sus habilidades, sino que también aumentará su confianza en su capacidad para manejarse solo al volante.
Establecer reglas
Has leído las estadísticas, has visto las noticias y conoces los riesgos asociados a la conducción de adolescentes. Teniendo todo esto en cuenta, es importante hablar seriamente con tu hijo adolescente y establecer reglas que debe seguir. A continuación, te presentamos algunas que debes tener en cuenta:
- Evite las distracciones, como enviar mensajes de texto mientras conduce, escuchar música alta, hablar con amigos, etc.
- No conduzca bajo ninguna circunstancia bajo los efectos del alcohol o las drogas.
- Abstenerse de conducir demasiado cerca de otro vehículo y otras formas de conducción o comportamiento agresivo.
- Preste atención a las normas de tránsito y respete el límite de velocidad en todo momento.
- Recuérdeles que conducir es un privilegio que se les puede quitar si se infringen las normas.
Es posible que algunos pongan los ojos en blanco, pero hablar sobre estas expectativas puede ayudar a su hijo a comprender la importancia de conducir con seguridad.
Estar listo
Pueden ocurrir accidentes, averías y otras emergencias relacionadas con el coche, y es buena idea preparar a tu hijo adolescente para todas y cada una de estas situaciones. Por ejemplo, muéstrale dónde se encuentran la matrícula del vehículo y el comprobante del seguro. Por supuesto, nunca querrás que tu hijo adolescente se encuentre en una situación grave, pero prepararlo con antelación y explicarle cómo manejar adecuadamente estas circunstancias lo ayudará a sentirse más seguro y cómodo para manejarlas si llegaran a ocurrir.
Tenga en cuenta las condiciones climáticas
El clima es un factor incontrolable que los conductores deben saber manejar mientras conducen. Por eso, preparar a su hijo adolescente para las condiciones climáticas adversas mientras está al volante es una decisión inteligente. Si está lloviendo, indíquele que encienda las luces delanteras y los limpiaparabrisas y reduzca la velocidad. Frenar en una carretera mojada no es lo mismo que hacerlo en una carretera seca. Y, si hace demasiado mal tiempo para conducir, anímelo a encontrar un lugar seguro para esperar hasta que pase el mal tiempo o disminuya la velocidad lo suficiente para que su hijo adolescente pueda llegar a salvo a su próximo destino.